VERGONZOSO

Desde hace unas semanas en nuestro país parece estar de moda sacar a la luz vídeos de dudosa moralidad, por decirlo de alguna manera, en los que menores de edad aparecen realizando prácticas sexuales. Los medios de comunicación de toda la nación se han hecho eco de estas grabaciones, muchas de las cuales han desembocado en denuncias. Mi pregunta ante todo esto es: ¿qué estamos haciendo mal?

Está claro que no toda la juventud es igual, pero nos basta una pequeña minoría para cuestionarnos si realmente estamos haciendo todo lo que podemos. Para preguntarnos si realmente funciona la sociedad que hemos montado. Y está claro que algo está fallando. Ya sea la sociedad, la familia, las amistades, el contexto o la escuela. Y es en este último campo en el que, como docentes, debemos trabajar. 

No sé qué método deberíamos llevar a cabo para prevenir estas conductas en los jóvenes. ¿Una buena charla? ¿Un castigo? ¿Programas de prevención?. Sólo sé que así no podemos seguir. No podemos ver esas conductas ni comportamientos como algo normal, ni fruto del paso del tiempo y las nuevas "aficiones" de la juventud de hoy en día porque, haciendo esto, estaríamos tirando la toalla. Una cosa es que sepamos que la sociedad cambia, pero otra muy distinta es que se aleje de la normalidad. Y al hablar de normalidad me refiero a todas aquellas actitudes propias de su edad. ¿Cómo es posible que una joven de 15 años no se dedique a jugar a la comba o ir al cine y si a esos menesteres? ¿Por qué se desechan los juegos de toda la vida y se cambian por estos, que de juegos tienen poco? 

El problema está en que intentamos ser mayores muy pronto. No protegemos a los niños/alumnos ante este mundo loco y que hace años perdió el rumbo. Lo normal hoy en día es que los niños lo tengan todo y nazcan practicamente pegados a una Wii, Play Station y demás aparatos electrónicos que le alejan de lo importante, de estar con sus amigos, en la calle, frente a un balón de fútbol o una comba. Y cuando por fin se reúnen con los demás empiezan a jugar a todos estos juegos que, seguramente hayan visto en la tele, oído por otros más mayores... Sin saber verdaderamente lo que están haciendo, sin ser conscientes de la problemática que todo esto supone. Y lo peor de todo es que apuesto cualquier cosa a que muchos de estos niños llevan a cabo esas prácticas por la gracia de salir en la tele y ser los más gallitos del colegio. Pues qué queréis que os diga, me parece VERGONZOSO.

Es vergonzoso que no seamos capaces como sociedad de limitar todas estas actitudes y procurar la mejor educación para nuestros pequeños. Porque todos ellos no son conscientes de lo que realizan y, muy probablemente, cuando sean más mayores se arrepentirán y mucho de todo lo que han desperdiciado por intentar crecer demasiado pronto. Porque a los 20-25 años sí se está preparado para todo ello, pero ya no es tan corriente jugar a la cadeneta, a los columpios o a la rayuela. 

Como docentes tenemos una labor importantísima en relación a todo esto. Por favor, no permitamos que el futuro de nuestro país vea estas cosas como algo normal y encima, de moda.

Sólo pido que la gente no intente crecer demasiado pronto. Todo llega en esta vida. 

"Perdona, si digo, que quiero seguir siendo lo de ayer. Un niño, sin miedo, que regala su cariño no sabe porque"

(Imagen sacada de Google)