En el centro Cultural Ruso de Kabul hace tiempo que no hay exposiciones. Hace tiempo que no hay siquiera techos. Los bombardeos de la guerra acabaron con dicho edificio. Hoy día, entre los múltiples restos de la guerra en el edificio (los casquillos de bala, las paredes resquebrajadas...) se abre paso todo un collage de grafitis. Grafitis de nuevos artistas que en el país asiático intentan abrirse paso. Grafitis que intentan reflejar aspectos de la sociedad, de sus vidas, de sus pensamientos...
Toda esta gente está algo perseguida, como en nuestro país, tampoco hay que imaginarlo demasiado, pero lo que realmente es extraño observar es que la grafitera en este caso sea una mujer.
Shamsia Hassani es la primera (o mejor dicho, la primera que sale a la luz) grafitera de este país, Afganistán. En sus obras refleja su sentimiento anti-burka así como las ansias de libertad de toda una joven generación que anhela vivir en paz y de manera libre. Sus grafitis se caracterizan porque reflejan el azul en sus creaciones principalmente.
Lo que intenta demostrarnos esta artista, a mi parecer, es que las cosas se pueden mejorar, todo puede cambiar. Y que los anhelos que ella persigue son aplicables a cualquier persona, mujer en este caso, que viva en una situación parecida.
Hoy mis saludos van especialmente por ellas. Que no se rindan nunca. Que miren el lado positivo. Y, sobre todo, que luchen. :) Siempre hay algo en esta vida por lo que merece la pena luchar. Para Shamsia es un mundo mejor. ¿Y para vosotros?
Hasta la próxima amigos :D
“Sé
que no puedo hacer todo por mí misma pero quiero traer el cambio.
Simplemente si logro cambiar el pensamiento del 1% de las personas de
Afghanistan, ya sería algo”.
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