Ayer se celebró el día Mundial de los Trabajadores. Esta fiesta se comenzó a celebrar tras el acuerdo del Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional de París, 1889. Desde entonces, se ha convertido en una jornada de lucha obrera y reivindicativa.
El Cuarto Estado, de Giuseppe Peliizza da Volpedo
¿Por qué reivindicativa? Reivindicativa porque la clase obrera nunca ha gozado de los mismos privilegios que los mandatarios. Reivindicativa porque a veces es bueno alzar la voz y gritar que no se están haciendo bien las cosas. Reivindicativa porque nunca es bueno conformarse con lo que se tiene. Siempre hay que intentar aspirar a más.
En este país, por desgracia, sabemos un rato de reivindicaciones. Bueno, quizá no tanto. Quizá preferimos reivindicar "de puertas para dentro". Quizá esté mal visto defender lo que es nuestro, no lo sé. Puede que veamos esas manifestaciones como algo típico de perroflautas o de vagos y maleantes que se entretienen rompiendo cristales e introduciendo silicona en cerraduras. Y no niego que algo de ello también pueda haber. Pero es muy triste no luchar aludiendo a excusas banales y pretender que por arte de magia todo se solucione. Y pretender, asimismo, que los de arriba, los de el dinero, vayan a venir a repartirlo con nosotros. Eso, señores, no va a ocurrir.
Y en medio de todo esto, siempre están los típicos "curritos" que día tras día tienen que aguantar en un trabajo que no les gusta. Que día tras día darían lo que fuera por cambiarse a otro puesto que les reporte mayor felicidad. Pero la cosa no está como para desperdiciar un mísero sueldo de 600 euros al mes. Y sino que se lo digan a los 6 millones de parados de nuestro país. Toda esa gente que bastante paciencia está teniendo. Y toda esa gente probablemente se desahogue en manifestaciones como las que ayer fueron capaces de unir a todo el mundo. Fijáos que es algo que realmente emociona. NI LA RELIGIÓN, NI EL DINERO, NI LA COMIDA HAN HECHO EL MISMO EFECTO LLAMADA QUE UN DÍA QUE PERSIGUE LA IGUALDAD, LA LIBERTAD...
Yo sólo lo puedo explicar diciendo que la mayoría de la población se harta de sus respectivos "jefes". Y ese hartazgo, por algún lado ha de salir. ¿Tal vez pancartas originales?
¿O mejor viñetas?
¿Un poco de música tal vez?
Yo no digo que haya que ir de manifestación. Tampoco quejarse del actual Gobierno que, como el anterior, lo está haciendo muy mal. Yo ahi no me meto. Pero qué queréis que os diga, también resulta divertido visitar todas esas reuniones sociales. En ellas no sólo encontraréis los famosos perroflautas, indignados, yayoflautas... También gente de todo tipo. Gente con sus polos y sus jerseys. Gente mayor, pequeña... Gente animada, gente muy ocurrente. Gente harta y que lo manifiesta de la manera más artística posible. PARA MÍ TAMBIÉN ES ARTE. Refleja unos sentimientos, provoca reacciones, ¿por qué no? ¿Lo llamamos arte de la crisis? ¿ManifestARTE tal vez?
Probablemente pocas cosas cambiarán con estas manifestaciones de carácter público. Tal vez sí. Pero lo realmente bonito de todo esto es saber que hay gente que tiene otro punto de vista. Gente que lo manifiesta de la manera más amena posible. Gente que comparte las penas y las exigencias de los demás allí presentes. Con quien identificarnos o a quien criticar. Estos artistas callejeros buscan otra forma de hacer las cosas.
En definitiva, buen día del Trabajador a todos. Una pena que esos 6 millones de españoles que lo buscan aún no lo tengan. ¡Ánimo!
Imágenes de Google
Obra "El cuarto Estado" y la información basadas en: https://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_Internacional_de_los_Trabajadores
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